2022 ya está dando sus últimos coletazos pero eso no significa que todavía no encontremos alguna que otra sorpresa en el ámbito musical, porque desde luego en esta recta final nos hemos topado con uno de los mejores discos del año con el debut de Pölvora, formación valenciana que ha sabido unir lo mejor de cada casa.
Estaba claro que algo bueno iba a salir cuando en este nuevo grupo encontramos a gente que son una eminencia dentro del hard rock español como son Israel y Alex (Uzzhuaïa, Capitán Booster) a las guitarras, Rubén Lozano (13 Millas) al bajo, José (Uzzhuaïa, 13 Millas) al bajo y Lazy Lane (Jolly Joker) a la voz. Una combinación ganadora de gente que lleva años de carretera, conciertos, grabaciones y de dejarse la piel por el rock N'Roll. Desde luego las expectativas estaban altas y Pölvora las han cumplido con creces.
Viendo de dónde vienen los componentes, no hay muchas sorpresas respecto al sonido, vamos a encontrar momentos que recuerdan a las bandas ya citadas pero con su propia personalidad e impregnado de calidad, carisma y mucho mimo. Parece que la banda estuviera formada hace 10 años porque se nota que se conocen todos de hace tiempo y han sabido todos girar hacia la misma dirección, creando un trabajo sólido donde ninguna canción es de relleno y que todas y cada una podrían ser un single.
Ya sólo con dar al play y escuchar Una Vida Sin Más nos damos cuenta del tremendo disco que tenemos ante nosotros, con ese sonido heredero de The Cult tan característico y esas guitarras que se nota que son de Uzzhuaïa. La sorpresa es escuchar a Lazy Lane cantando en castellano. Reconozco que tenía mis dudas al haberlo escuchado siempre cantando en la lengua de Shakespeare, pero esos temores se disipan enseguida. En Pölvora se aleja un poco de los registros agudos y rasgados de Jolly Joker para brillar y sorprender con tonalidades más melódicas pero sin dejar nunca de lado esa chulería y carisma que desprenden sus cuerdas vocales. Con este proyecto demuestra que es una de las mejores voces del rock nacional.
Nada Que Hacer saca a relucir el lado melódico de la banda, siendo un corte más ligero pero cargado de intensidad en las guitarras, el solo y en la pegada de la batería. Los estribillos son el punto fuerte del disco y prueba de ello es Sicarios, pieza más rockera y macarra y cercana a los esquemas de Jolly Joker cuyo estribillo pegadizo da mucho juego, mientras que el resto es pura chulería, con Lazy Lane más desatado.
Dispuesto A Ladrar, con aires de hard rock americano desprende buenas vibraciones, de nuevo un estribillo fácil de recordar con una sección rítmica que va marcando territorio mientras las guitarras nos deleitan con una variedad de ritmos, solos y melodías. Una de las mejores canciones del disco en mi opinión es Polvo, que tiene ese toque comercial de radiofórmula (siempre en el buen sentido) con una letra muy nostálgica y personal de desengaño amoroso y ahora sí, posiblemente el mejor estribillo de todo el álbum que lleva días clavado en mi cerebro. Tenemos a un Lane soberbio haciendo una de sus mejores interpretaciones, viviendo cada frase. De esos temas que puedes escuchar en bucle y no cansarte, desde luego han sabido componer un himno que insisto que si sonara en las radios sería un éxito.
Ceniza Y Vino incorpora guitarras acústicas, trayéndonos una pieza más intimista y sentimental que va acompañada de un excelente solo de guitarra que logra transmitir las mismas sensaciones que la letra. Mirar Atrás nos hace volver al lado más rockero de Pölvora, con el retorno de un Lazy Lane más gamberro a las voces y otro pedazo de estribillo que se suma a la lista. Tampoco hay que dejar de mencionar aquí el trabajo de las guitarras, que al igual que la voz, se vuelven más duras.
Ciudad De Lobos mantiene esa vibra de rock, con unas líneas de bajo muy contundentes y distorsionadas que sirven de base para que las guitarras hagan su magia y para ya sorpresa de nadie un estribillo ganador. Volvemos a encontrar esas influencia de The Cult en Verte Caer, con coros que acentúan la parte central de la canción y donde toda la banda está sublime.
Cuchilla Y Plomo cuenta con unas guitarras más cortantes y una base rítmica que es más protagonista, siendo el tema más pesado y heavy del disco, que con cada escucha convence más y con unos segundos finales donde Lazy Lane se deja la garganta firmando una gran interpretación.
Quémalo es una de esas canciones que con sus primeros segundos ya intuyes que estás ante un éxito. Guitarra creando un riff convincente, letra optimista y el que es para mí el segundo mejor estribillo del disco, que tampoco vas a poder quitártelo de la cabeza en días. Continúan con guitarras más oscuras y distorsionadas muy de la escuela de Black Sabbath y vuelta al genial estribillo. El tema más corto del disco pero el más directo y cañero.
Cierran con Nunca Más, canción que habla sobre la violencia de género y que me gusta que cada vez más sean las bandas que abordan este asunto para combatirla y concienciar de esta lacra. En lo musical es muy directa y melódica que consiguen que el álbum termine en lo alto y sin ninguna fisura en sus 45 minutos de duración.
Desconozco si Pölvora será un proyecto con vistas al futuro o simplemente un capricho que estos músicos han querido darse, pero lo que es innegable es que Fuego Y Ceniza ha sido una grata sorpresa para los seguidores del rock y que pone en evidencia la tremenda calidad del rock valenciano, figurando en esta formación algunos de los mejores músicos de este género. Un álbum que está plagado de buenas canciones, excelentes estribillos, grandes interpretaciones y donde rebosa calidad. El año no podía cerrarse de mejor manera. Ojalá Pölvora en un futuro nos regalen más discos así.
Discográfica: OCK
Formación
- Lazy Lane - Voz
- Alex Simón - Guitarra
- Izzrael Ferrer - Guitarra
- Rubén Lozano - Bajo
- José - Batería
Tracklist
- Una Vida Sin Más
- Nada Que Hacer
- Sicarios
- Dispuesto A Ladrar
- Polvo
- Ceniza Y Vino
- Mirar Atrás
- Ciudad De Lobos
- Verte Caer
- Cuchilla Y Plomo
- Quémalo
- Nunca Más
Puntuación: 9/10
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