Nightwish - Endless Forms Most Beautiful

Que Nightwish saque nuevo disco es motivo de mucha, mucha expectación. La banda de metal sinfónico más importante del género ha pasado por varios baches, haciendo que su popularidad empezara a cuestionarse. Estaba claro que tras la expulsión de la malograda Annete Olzon la banda necesitaba una vocalista que cumpliera con las exigencias de la banda y de un público descontento y la difícil tarea ha caído sobre los hombros de Floor Jansen, una elección lógica y acertada, puesto que la vocalista ya estuvo cubriendo el puesto de Olzon durante la gira de Imaginaerum. Además hay que contar también con un nuevo fichaje, el de Troy Donockley, quien aporta un toque folk a la música de los fineses. Volviendo a Floor Jansen, es innegable que su voz y su trayectoria son las ideales para una banda como Nightwish, pero he de decir que me esperaba más de ella en este disco, y la culpa no es suya. Jansen cuenta con unos registros vocales muy potentes (sólo hay que oírla cantar en su etapa en After Forever o en su banda Revamp) pero que Nightwish no ha sabido explotar para este disco. Me parece increíble que tras verla cantar en directo los temas de Nightwish (su actuación en Wacken 2013 es apoteósica) Tuommas no haya pensado en sacarle más provecho. De hecho, Endless Forms Most Beautiful es un disco que Annete Olzon podría haber cantado perfectamente, puesto que los registros vocales que se utilizan no suponen ninguna complicación para ella. Salvando las distancias y sin entrar en comparaciones entre vocalistas, el disco no parece haberse compuesto para que Floor Jansen se luzca a placer. Musicalmente el álbum pretende en algunos momentos emular a Once, el álbum más mediático y aclamado de la banda, pero tras escucharlo varias veces, tiene más en común con Dark Passion Play e Imaginaerum, de hecho, en algunos momentos tiene fragmentos que podrían encajar perfectamente en Imaginaerum.

Pasando al análisis de las canciones, el disco abre con Shudder Before The Beautiful, el típico tema cañero que abre los discos de Nightwish y que entra fácil. El inicio recuerda a Dark Chest Of Wonders, dando a entender que la banda ha buscado repetir la fórmula que los catapultó a la fama. Floor lo borda en un tema cargado de orquestación y teclados. Weak Fantasy se torna más heavy y oscura donde las guitarras ganan protagonismo y se recupera el dúo vocal con Marco Hietala, aunque en este disco el barbudo bajista quede relegado a un discreto segundo plano. Una lástima, puesto que su voz siempre aportaba un lado más metalero a las canciones, aunque imagino que es para darle más protagonismo a la nueva vocalista. Élan es el típico tema a medio tiempo que tanto gusta a Nightwish y que sirvió de adelanto del disco. Aquí se nota la carga folk que añaden con la inclusión de Troy Donockley. La canción repite el patrón de composiciones como Nemo o Amaranth. En su día cuando salió me pareció un corte soso y facilón, pero con las escuchas consigues hacerte con él. Aquí encontramos el ejemplo de que Floor podría haber dado más de sí, puesto que apenas explota sus registros, pudiendo haberle dado más carga a la canción, pero bueno, todos sabemos que es Tuomas quien toma las decisiones y así lo querría el excéntrico teclista. 

Vuelve la orquestalidad con Yours Is An Empty Hope donde destaca la guitarra que nos vuelve a recordar a Dark Chest Of Wonders. De nuevo Marco Hietala interviene a las voces, cantando junto a Floor y colaborando en los coros. Una de las mejores piezas del disco por su oscuridad y agresividad que combina con las partes orquestales. Our Decades In The Sun es una balada muy tranquila y llena de detalles donde Floor saca a relucir sus tonalidades más suaves, aunque no es de lejos la mejor balada que han compuesto. My Walden tiene un inicio celta/escocés donde se agradece la presencia en la banda de Troy Donockley. Vocalmente la encuentro pobre donde únicamente las partes de Troy merecen la pena. Por lo demás una canción mediocre. La propia Endless Forms Most Beautiful se presenta como un tema 100% Nightwish, con los teclados llevando el peso de la melodía y un estribillo que engancha. Repite esquemas que ya se han visto anteriormente en la discografía de la banda. 

Edema Ruh destaca por sus partes melódicas donde Tuomas Holopainen y Emppu Vuorinen se reparten el trabajo. Alpenglow la encuentro algo sosa, falta de fuerza, quedándose en el intento. Es una lástima porque Floor la canta bastante bien, pero le falta de agresividad en la interpretación. La instrumental The Eyes Of Sharbat Gula nos sumerge en una ambientación oscura pero calmada donde la flauta, los coros y la orquestación se reparten el trabajo. Sinceramente, una pieza que no aporta nada al disco. Por último llega el turno de The Greatest Show On Earth, un corte de 24 minutos donde la banda desata todo su arsenal para brindarnos un tema pomposo, grandilocuente y sinfónico. Tras un inicio algo calmado con el piano de protagonista, escuchamos la narración del científico Richard Dawkins (el cual ya pone su voz en el primer tema) Luego el tema coge fuerza para dar paso al resto de instrumentos y la voz de Floor. La orquestación, siempre presente, parece (por fin) mostrarse más épica. No falta el juego de voces entre Marco y Floor y en definitiva, todos los recursos típicos de Nightwish. Hacia el final de la canción diferentes sonidos de animales comienzan a aparecer (no es de extrañar, puesto que el tema versa sobre la evolución de las especies y en el trabajo del propio Richard Dawkins) Y junto al sonido del mar y de ballenas ponen fin a esta canción cargada de opulencia.

En resumen Endless Forms Most Beautiful lejos de suponer una ruptura respecto a sus dos discos anteriores es una continuación natural que bien podría encajar en la etapa anterior de Nightwish con Anette Olzon. Así que si eres de los que ha renegado de Dark Passion Play e Imaginaerum este disco no va a sorprenderte para bien. La banda ha desaprovechado el tener entre sus filas con una vocalista capaz de hacerles volver al sonido de sus primeros discos para seguir estancados en la fórmula de sus últimos años. Un disco que se me hace largo, con canciones poco inspiradas y sin ninguna que resalte sobre las demás, les ha faltado componer el típico hit que sí tienen en trabajos anteriores. Si te gusta el metal sinfónico encontrarás cosas buenas en este disco, pero si eres un fan acérrimo de Nightwish estás lejos de encontrarte con su mejor disco. Esperemos que Tuomas entre en razón y para la próxima sepa despertar la magia que esconde la banda.

Discográfica: Nuclear Blast

Formación

• Tuomas Holopainen - Teclado
• Floor Jansen - Voz
• Emppu Vuorinen - Guitarra
• Marco Hietala - Bajo, voz
• Troy Donockley - Gauita irlandesa, whistle, voz
•  Kai Hahto - Batería

Tracklist

1. Shudder Before The Beautiful
2. Weak Fantasy
3. Élan
4. Yours Is An Empty Hope
5. Our Decades In the Sun
6. My Walden
7. Endless Forms Most Beautiful
8. Edema Ruh
9. Alpenglow
10. The Eyes Of Sharbat Gula
11. The Greatest Show On Earth

Nota: 7/10