Las suizas Burning Witches han logrado ganarse el reconocimiento y cierta reputación en un breve periodo de tiempo. En 4 años han publicado 3 álbumes de estudio y girado sin cesar por toda Europa, mereciendo ese clamor por parte del público.
Las alarmas saltaron cuando el pasado año y de forma repentina, la vocalista Seraina Telli abandonaba el seno de la banda, pero casi de manera inmediata su reemplazo fue anunciado y Laura Guldemond pasó a ocupar el puesto, el cual resultaba una responsabilidad enorme ya que la ex vocalista era una de las señas de la banda. Sin embargo Laura rápidamente demostró su valía en directo, tal como hizo en la pasada edición del Leyendas del Rock, tranquilizando a los seguidores de Burning Witches.
Con Guldemond ya asentada, han publicado su nuevo trabajo Dance With The Devil, el cual mantiene el sonido y la esencia de los dos anteriores y con el cual la formación suiza sigue creciendo. Así pues vamos a encontrar pocas diferencias en su música, conservando ese heavy metal clásico con reminiscencias tanto del heavy europeo como americano, pequeñas dosis de power y una ambientación oscura acorde a la temática de sus letras.
El disco abre con la introductoria The Incantation, que de manera teatral y creando una atmósfera tétrica da paso a Lucid Nightmare, donde encontramos un buen trabajo de las guitarras, las cuales crean unos buenos riffs, sonando contundentes, al igual que la sección rítmica. Laura se estrena cantando con su timbre personal, con influencias de Doro o Leather Leone y desplegando unos registros agudos y rasgados, que van como anillo al dedo a estas composiciones. Un corte cañero que nos hace ver que pese al cambio de vocalista la banda sigue engrasada y en plena forma.
La propia Dance With The Devil cuenta con un inicio potente con las guitarras desatadas, mostrando ese gran duplo que son Romana Kalkuhl y Sonia Nusselder que son lo mejor de este álbum, aportando ambas calidad musical y compositiva. A destacar el estribillo, facilón y pegadizo ideal para ser entonado en directo.
Wings Of Steel fue en su día el single que sirvió para presentar la nueva alineación y desde luego tiene todas las características para serlo. Es un corte muy heavy y acelerado, con una batería atronadora y con Laura mostrando su potencia vocal. Buena combinación de partes cañeras con otras melódicas al igual que el de las guitarras, que se doblan y ejecutan unos solos muy destacables.
Six Feet Underground es una de las canciones más cañeras del disco, que cuenta con un riff de guitarra clásico y canónico y con Laura volviendo a hacer alarde de registros, cantando partes con tonalidades más graves, casi narrando la canción hasta elevarse a otros más agudos.
Black Magic es la balada, que inicia de manera muy relajada, con guitarras limpias, Laura cantando melódica con un timbre más dulce y derrochando feeling, ganándose su puesto en la banda. Muy buenos aportes de la batería al igual que los solos, que se doblan creando unas melodías poderosas.
Sea Of Lies tiene un buen comienzo, muy oscuro, con unas guitarras más densas, siendo un medio tiempo muy heavy, con otro gran estribillo y con Laura cantando más agresiva.
The Sisters Of Fate vuelve a contar con un riff clásico que me recuerda a Accept, siendo una pieza muy movida, con predominancia de las guitarras junto a una base rítmica muy marcada, hecha para mover la cabeza y para que las dos guitarristas se luzcan.
Necronomicon es posiblemente el tema más agresivo, acercando por momentos su sonido hacia el thrash metal y con un estribillo oscuro y sencillo, aunque quizás peca de repetitivo.
En The Final Fight dan un pequeño giro al sonido para ofrecer pinceladas de power metal y riffs al más puro estilo de Iron Maiden, aunque con una estructura más simple y estribillo simplón y con poca garra.
Threefold Return es una vuelta a la agresividad con una buena base y melodías oscuras que aportan cierta atmósfera tétrica que funciona bien, junto a unos buenos solos.
Como va siendo costumbre en su discografía, no falta una versión de algún clásico del heavy metal. Tras rendir homenaje a Dio con Holy Diver y a Judas Priest con Jawbreaker, ahora le toca el turno a Manowar con la versión de Battle Hymn, con la particularidad que en el tema colabora el mismísimo Ross The Boss a la guitarra y Mike LePond (Symphony X y bajista en la banda de Ross The Boss). Se mantienen bastante fieles a la original, dándole el toque de Burning Witches y poniendo el toque épico al álbum para finalizarlo.
Burning Witches han sabido sobreponerse al cambio de vocalista (algo siempre complicado en una banda) publicando un álbum que cumple con las expectativas, quizás algo cuesta abajo en su tramo final pero que convence y se disfruta. No cabe duda que son una de las formaciones con más éxito de los últimos años y que todo indica que van a seguir creciendo.
Discográfica: Nuclear Blast
Formación
- Laura Guldemond - Voz
- Romana Kalkuhl - Guitarra
- Sonia Nusselder - Guitarra
- Jeanine Grob - Bajo
- Lala Frischknecht - Batería
Tracklist
- The Incantation
- Lucid Nightmare
- Dance With The Devil
- Wings Of Steel
- Six Feet Underground
- Black Magic
- Sea Of Lies
- The Sisters Of Fate
- Necronomicon
- The Final Fight
- Threefold Return
- Battle Hymn
Puntuación: 7.5/10