Cage + Lorraine Cross + Prometheus
29/04/2017
Sala Paberse Club, Sedaví, Valencia
Los norteamericanos
Cage andan inmersos en su gira europea y Valencia era la última parada de su periplo en el que han pisado países como Israel, Grecia, Alemania, Suecia o Francia.
Cage no es precisamente una banda fácil de ver en directo por lo que las expectativas y las ganas de disfrutar de su directo eran grandes entre los asistentes, siendo una afluencia más que notable la que se concentró en el Paberse Club de Valencia.
Abrían la velada los valencianos Prometheus, banda que practica un heavy metal añejo influenciados por las grandes bandas de metal de los 80 como Barón Rojo, Muro, Obús o Zarpa.
La banda liderada por los hermanos Vida continúa presentando su último trabajo
Dragón Y Titán del que interpretaron varios temas como la canción homónima con la que abrieron su concierto,
El Destino Del Mundo, la épica
Blasfemia con guitarras cabalgantes que recordaban a
Iron Maiden o
Enfrentando A La Muerte.
Con la cañera
Fuera De Control subieron los ánimos del público dando paso al himno de la banda
Sangre En Las Manos. Como colofón la versión de
Sangre Azul No Eres Nadie puso a cantar a los presentes para despedirse en el bis con
Hasta El Final, ofreciendo un concierto entretenido y enérgico.
Apenas unos minutos después aparecían en el escenario los franceses
Lorraine Cross, banda que acompaña a
Cage en sus fechas españolas. Con su mezcla de heavy/speed metal amenizaron la noche con temas como
Bonecraker, la potente
Full Speed In The Night o
Target Locked, perteneciente a su trabajo
Army Of Shadows editado en 2016.
Con su actitud y entrega fueron descargando canciones como
Hard To Get Out, Don't Waste Your Energy, su single
The Slab Was Trapped que fue uno de los mejores momentos de su actuación o la propia
Lorraine Cross.
Tras una pequeña intro se despidieron con sus dos últimas canciones de la noche,
Metal Zipper y
Life Is A Fight, donde los franceses consiguieron arrancar los aplausos de la sala y dejando el listón alto.
Llegaba el momento del plato fuerte de la noche y
Cage subieron al escenario bajo la ovación de un público ya congregado y con ganas de disfrutar del concierto. Todas las miradas se concentraban en el vocalista y líder de la banda Sean "The Hell Destroyer" Peck, quien pese al notorio cansancio que portaba tras la gira, asombró a todos con sus imposibles agudos y chorro vocal, recordando a grandes figuras del género como Rob Halford, Tim Ripper Owens o Matt Barlow.
Ya con
Shoot To Kill, tema de su primer álbum
Unveiled de 1988 nos dejaron a todos asombrados con la potencia y la entrega de los americanos. El combo formado por los guitarristas Casey “The Sentinel" Trask y el musculoso Dave "Conan" Garcia funciona a la perfección y nos asombraron con sus solos técnicos y veloces mientras que Sean Elg a la batería y Alex "The Captain" Pickard al bajo presentaban una base rítmica sólida.
I Am The King, de su álbum
Hell Destroyer, posiblemente el más reconocido de su carrera, consiguió hacer corear el estribillo a todos los presentes y la propia
Hell Destroyer, con el impresionante agudo inicial de Sean Peck ya nos conquistó a todos.
Tocaba avanzar hasta su último trabajo
Ancient Evil (2015) con
Beholder para después pasar a la potente
Kill The Devil, un tema que rebosa influencias de
Judas Priest y con un estribillo que fue coreado tras la insistencia de Sean Peck.
Uno de los momentos álgidos de la noche llegaba con la canción
Chupacabra, una de las conocidas de su discogafía que fue cantada por todos. Al terminar Sean Peck presentó a la banda, con teléfono móvil en mano grabando todo, presentándose a él mismo como el miembro más importante del grupo con las consiguientes risas del público. La sorpresa llegó con
The Sentinel, uno de los clásicos de
Judas Priest que la banda llevó a su terreno, interpretándola muy fiel a la original, algo que siempre es complicado.
Wings Of Destruction ponía final al concierto, no sin los esperados bises pedidos por el público, que no hicieron falta ser muy insistentes ya que rápidamente la banda, con esa simpatía que habían transmitido durante todo el concierto volvieron a enfundarse los instrumentos para ofrecernos dos temas más,
Black River Falls de su álbum
Science Of Annihilation y
White Magic con la que se despidieron con una enorme ovación, muestra de que no sólo habían ofrecido un buen concierto, sino que además se habían ganado al público.
Se cerraba así una noche de auténtico heavy metal con 3 grandes bandas entregadas que hicieron disfrutar de lo lindo a un público que se marchaba a casa satisfecho de una velada que esperamos que se repita pronto y esperando que
Cage no tarden mucho en regresar a estas tierras.
Texto: Alapont
Fotos: Lorena Mora