Los bardos están de vuelta. Han pasado 7 largos años desde que publicaron su último trabajo Beyond The Red Mirror y 3 desde su esperado proyecto sinfónico Twilight Orchestra: Legacy Of The Dark Lands. Si el primero fue un trabajo de tintes progresivos con gran carga sinfónica, el proyecto paralelo de Hansi Kürsch y Marcus Siepen fue directamente un álbum orquestal donde no había rastro de elementos de heavy metal. Es por eso, que tras haberse adentrado en terrenos tan opulentos y recargados, la banda ha optado por mirar hacia sus raíces y ofrecernos un disco más cañero, directo y cercano al speed metal para la gran alegría de sus seguidores.
The God Machine es esa genial mezcla entre el speed metal y el power metal que tan grandes les hizo en los 90 y que nos traen a los Blind Guardian más inspirados, dando como resultado uno de sus mejores trabajos en años. La formación sigue siendo la misma desde hace 17 años: Hansi Kürsch a la voz, Marcus Siepen y André Olbrich a las guitarras y Frederik Ehmke a la batería. Como músicos invitados han contado con Barend Courbois al bajo y con Thomas Geiger a los teclados.
A destacar la portada del álbum, algo más alejada de lo que nos tienen acostumbrados, dejando de lado los dragones y hechiceros para darnos algo diferente pero igual de efectivo, siendo obra de Peter Mohrbacher. Como siempre, el disco ha sido grabado en los Twilight Hall Studios.
Pese a que la banda adelantó un total de 4 canciones (casi la mitad del disco, algo que le quita emoción a la hora de escucharlo entero) vamos a encontrarnos sorpresas dentro de The God Machine y que hará que guste tanto a sus seguidores más clásicos como a los que optan por su lado más power y sinfónico. Que nadie se espere una continuación del Somewhere Far Beyond o del Imaginations From The Other Side, a estas alturas eso es ya imposible, pero desde luego este disco se acerca a ese sonido y hará esbozar una sonrisa a aquellos nostálgicos que en sus últimas entregas se sintieron algo decepcionados.
Empiezan fuerte con Deliver Us From Evil, un tema oscuro pero acelerado, donde no faltan sus coros marca de la casa tan inspirados en Queen. Ya nos hace abrir los ojos como platos con esa batería demoledora (sin duda este es uno de los mejores trabajos de Frederik con la banda) y unas guitarras afiladas que en casi todo el disco van a ser las que comanden las canciones. Y cómo no, un Hansi Kürsch pletórico que de forma inexplicable mejora con los años, como el buen vino, pasando a dominar todo tipo de registros, desde agudos, graves, partes melódicas... para mí una de las voces más infravaloradas del metal, este señor es una mina de oro y en este disco se hace valer. Tenemos un estribillo convincente y en líneas generales un primer tema contundente que suena a Blind Guardian de principio a fin con esa unión entre potencia y melodía haciéndonos regresar a sus discos míticos. Primera sorpresa.
Damnation es prácticamente un tema de speed metal, volviendo a tener esa atmósfera oscura que tan bien sienta al sonido de la banda. Tras unos segundos de tensión, aceleran poco a poco hasta por fin darnos una pieza acelerada y cañera, con unos coros más solemnes y tétricos y donde lo mejor lo tenemos en las guitarras, que nos presentan unas melodías muy logradas y con unos solos excelentes. Hansi se vuelve algo más teatral en su interpretación en una canción cuya letra gira entorno a la novela El Nombre Del Viento de Patrick Rothfuss, y es que otra cosa que nunca falta en los trabajos de Blind Guardian son sus letras abordando la fantasía y la literatura.
Es en Secrets Of The American Gods (pieza basada en la obra de Neil Gaiman) donde van hacia su vertiente más power y melódica con elementos sinfónicos, solo que esta vez las partes orquestales ocupan un discreto segundo plano y donde hay mayor peso en los teclados, pero que también sirven de acompañamiento, sin eclipsar a los instrumentos principales. Hansi vuelve a dar lo mejor de sí mismo para darnos una interpretación magistral, donde la batería da ese toque más denso y las guitarras nos regalan melodías que hacen de este corte uno de los más épicos del álbum. Una muestra de que Blind Guardian pueden realizar también piezas recargadas y algo más barrocas pero sin dejar de lado su garra. Va directa a lo mejor del disco y que en su futura gira de presentación va a ser una de las imprescindibles.
Pasamos a Violent Shadows, primera canción que adelantaron en su momento y que ya hizo que las expectativas por este disco crecieran. Speed metal sin concesiones que nos recuerda a los primeros trabajos de los bardos. Un riff machacón, velocidad, Hansi más agresivo, letra que vuelve a abarcar la literatura fantástica (El Archivo de las Tormentas de Brandon Sanderson) batería con una pegada brutal y en líneas generales el tema que todo fan de los Blind Guardian del Follow The Blind o Tales From The Twilight World va a gozar. Otro de los temas ganadores del disco, de mis favoritos y que tampoco puede faltar en sus futuros repertorios.
Live Beyond The Spheres (canción titulada como su último disco en directo) nos da un respiro para ofrecernos una pieza más progresiva y experimental. Bajan las revoluciones en pos de un tema más denso, que puede que a muchos no les entre en la primera escucha, pero al que hay que darle una oportunidad porque tras varias reproducciones termina convenciendo. Coros más abundantes, guitarras atmosféricas y Hansi moviéndose cómodo en esta tesitura más relajada. Sin duda encajaría sin desentonar en álbumes como Beyond The Red Mirror o A Night At The Opera.
Architects Of Doom fue el último adelanto que ofrecieron antes de la salida del álbum, volvemos a esa ambientación oscura que tan bien les sienta para de golpe y sin aviso acelerarse y darnos otro tema de speed machacón y violento que en su estribillo se relaja en pos de darnos unos momentos de intensidad y melodía. Tenemos uno de los mejores trabajos de la dupla Olbrich / Siepen cuyas melodías y guitarras doblándose son marca registrada y un Hansi imparable que sigue dejando su impronta en cada interpretación.
Let It Be No More es un medio tiempo que roza la balada que en su estribillo gana cierto punch y que me he sorprendido a mí mismo tarareando en más de una ocasión. Hansi es el absoluto protagonista dejando el resto de instrumentos como acompañantes a excepción del solo cargado de intensidad que le hace ganar puntos. Sin ser el mejor corte del disco, se deja escuchar.
Aún les queda un as guardado en la manga con Blood Of The Elves, aborando esta vez la famosa saga literaria de Andrzej Sapkowski de Geralt de Rivia (o para muchos, su saga de videojuegos The Witcher) volviendo a ese speed metal de sus inicios (esta vez con influencias del Imaginations From The Other Side) con un genial estribillo, batería que nos vuelve a volar la cabeza, guitarras heavys y que cortan el viento y Hansi recordándonos a sus años mozos. Así sí Blind Guardian, así sí.
Cierran con Destiny, que quizás no era la mejor canción con la que poner punto y final al disco (habría quedado mejor cerrando con la anterior) siendo un medio tiempo algo descafeinado que pretende transmitir una atmósfera de frío y que me deja algo indiferente, un corte de relleno o que al menos a mí no me ha logrado calar y que me parece la más floja de este trabajo.
The God Machine es el álbum con el que Blind Guardian han querido dar un vistazo a su pasado glorioso y darnos un trabajo donde vuelve el speed metal y el power metal de sus discos más exitosos, alejándose del barroquismo y los excesos orquestales y que va a gustar a sus seguidores más puristas y a los más cercanos a su sonido más actual. 9 cortes muy disfrutables con una producción exquisita donde las guitarras vuelven a tener el peso que se merecen, un Hansi Kürsch pletórico y en definitiva el álbum que los fans de los bardos merecemos.
Discográfica: Nuclear Blast
Formación
- Hansi Kürsch - Voz
- André Olbrich - Guitarra
- Marcus Siepen - Guitarra
- Frederik Ehmke - Batería
Tracklist
- Deliver Us From Evil
- Damnation
- Secrets Of The American Gods
- Violent Shadows
- Life Beyond The Spheres
- Architects Of Doom
- Let It Be No More
- Blood Of The Elves
- Destiny
Puntuación: 9/10