Los valencianos Jolly Joker vuelven a las andadas con su tercer álbum Never Say Forever. Tras dos grandes trabajos como fueron Sex, Booze & Tattoos y Here Comes... The Jokers, ahora dan una vuelta de tuerca a su sonido manteniendo la esencia sleazy pero añadiendo nuevos factores que hacen de esta entrega una auténtica maravilla para los seguidores del hard rock.
La banda se ha tomado su tiempo a la hora de lanzar su nuevo disco, han rodado mucho en directo y Alex, la última incorporación de la banda a las baquetas se ha integrado a las mil maravillas, por lo que nos encontramos con unos Jolly Joker más engrasados, cañeros y dispuestos a comerse el mundo.
Se nota que han cuidado al milímetro todos los detalles de este álbum, comenzando por su portada, obra de Doctor Octane y pasando por la producción, la cual es perfecta o sus canciones, que reflejan la actitud y la filosofía de la banda.
Anywhere abre el disco con un inicio al bajo galopante y la guitarra de Yanick irrumpe rabiosa. Lazy Lane vuelve a asombrar con su voz, sonando rasgada y aguda. Sinceramente me atrevo a decir que en este álbum se supera, mostrando nuevos registros y una actitud que como siempre es una de las características principales del vocalista.
Nasty Habits es una canción que nada más sonar ya se reconoce que es de Jolly Joker. Un riff de guitarra de la escuela de Guns N' Roses, un estribillo que funciona a la perfección y unos ritmos de hard rock que amplían el abanico sonoro de la banda. I Believe fue el tema elegido como adelanto y no es de extrañar, con ese riff inicial que es pegadizo a la par que juguetón, mostrando el lado melódico de unos Jolly Joker macarras con un Lazy Lane que juega a cambiar de registros sin despeinarse y con una auténtica demostración de fuerza por parte de la sección rítmica, con Luke desatado a las cuatro cuerdas y Alex demostrando su poderío tras los parches.
Llegamos al ecuador del disco con un auténtico temazo como es I Am Rock 'N' Roll, toda una declaración de principios con un tema que desprende aires a Mötley Crüe pero también a Hellacopters. Macarra, directo y con un estribillo que es imposible no cantar en directo. Se han sacado de la manga un himno cuya letra refleja la actitud y la filosofía del rock 'n' roll.
Con Hey Babe retornan al sleazy donde destaca Yannick a las seis cuerdas, con un excelente solo y haciendo vibrar la guitarra, apostando de nuevo por la melodía y por un estribillo que se convierte en el protagonista de la canción. Stay Behind es todo lo contrario, rock duro y sucio que va directo a la yugular, donde encontramos referencias a AC/DC, Motörhead y al punk británico. Una auténtica estampida sonora que te pasa por encima. Personalmente una de las mejores piezas del disco.
Set My Soul On Fire es una de las sorpresas del álbum, con ese aroma a The Cult que tanto gusta a la banda y con un Lazy Lane mostrando registros vocales no escuchados hasta ahora. Un corte más setentero, con unas líneas de bajo que por momentos se adueñan de la canción y con un sonido que se aleja de lo que Jolly Joker nos tienen acostumbrados. Un tema más complejo con el que han jugado a expandir su territorio sonoro y han conquistado con creces.
Para terminar nos brindan I Wanna Go, un tema rockero, festivo y bailable a modo de descarga final, con inclusión de piano y una guitarra peleona con la que asestan su último golpe.
Never Say Forever es definitivamente el álbum que encumbra a Jolly Joker a la cima del rock nacional. Su trabajo más maduro y complejo pero sin perder esa chulería y actitud que les define. Ningún seguidor del hard rock debe pasar por alto este trabajo, puesto que se ha coronado como el mejor del año en su estilo. No podrás pararlos, porque ellos son Rock 'N' Roll!
Discográfica: The Fish Factory
Formación
- Lazy Lane - Voz
- Yannick - Guitarra
- Luke - Bajo
- Alex - Batería
Tracklist
- Anywhere
- Nasty Habits
- Believe
- I Am Rock & Roll
- Hey Babe
- Stay Behind
- Set My Soul on Fire
- I Wanna Go
Puntuación: 9/10
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