Los suecos Astral Doors publican su octavo álbum de estudio Black Eyed Children, predecesor de aquel Notes From The Shadows que tan buenas críticas cosechó. En este nuevo trabajo pocas sorpresas vamos a encontrarnos ya que Astral Doors se caracterizan por su sonido característico y continuista que llevan practicando desde sus inicios.
Claro ejemplo de ello es We Cry Out, primer corte del disco que ya nos presenta los elementos clásicos de la banda, estribillo facilón, guitarras ochenteras y el teclado funcionando en este caso como apoyo. Es el vocalista Nils Patrick Johansson quien con su voz pone el punto distinguible y elegante. El vocalista no pierde fuelle con los años y su característica voz sigue siendo el punto fuerte del combo sueco.
Walls es un medio tiempocon partes acústicas donde exceptuando la aportación vocal de Nils, se trata de un tema monótono y poco original. God Is Devil sube el listón gracias a la efectividad de los teclados y a la pegada de la batería junto a un efectivo estribillo. En los álbumes de Astral Doors no suele faltar una canción con introducción de hammond emulando a Deep Purple y la norma se cumple con Die On Stage con ese fabuloso trabajo de Jocke Robergal a las teclas para luego dar paso a unas guitarras que se adueñan del tema junto a un Nils más oscuro que dan como resultado el mejor corte del disco.
En Tomorrow's Dead volvemos a encontrar una introducción acústica en otro medio tiempo con cambios de ritmo y con un tremendo Nils cambiando de registro vocal de manera pasmosa. A destacar también el solo de guitarra. En Good VS Bad sacan la vena power en una pieza enérgica con presencia del doble bombo y con similitudes a Rainbow, sobretodo en el solo de guitarra. Desde luego la inclusión de Mats Gesar como segundo guitarra ha sido un refuerzo más que positivo en el sonido de Astral Doors.
Suburban Song es un heavy metal melódico donde el bajo y la batería crean un muro sonoro para que el resto de instrumentos puedan desatarse, con buenas melodías de teclado y como siempre Nils clavando la voz. Lost Boy es un tema bastante lineal al que salva su parte instrumental con su eficiente solo de guitarra. Slaves To Ourselves recupera el lado salvaje de los suecos gracias a unos teclados sobresalientes y a las guitarras que impregnan de personalidad a la canción.
Para terminar nos presentan el tema que pone título al ábum, el cual roza los nueve minutos de duración y donde buscan experimentar con su sonido pero sin salirse de sus habituales esquemas. Encontramos pasajes atmosféricos, un estribillo oscuro y coreable y partes instrumentales muy trabajadas con la que ponen final al disco por todo lo alto.
Black Eyed Children no va a sobresalir en la discografía de Astral Doors y es un disco que cumple su cometido y agradará al seguidor medio de la banda, pero desde luego le falta alguna canción que lo haga destacar. Nada que objetar en el campo instrumental, simplemente le falta algo de empaque y esa garra que siempre ha caracterizado el sonido de Astral Doors.
Discográfica: Metalville
Formación
- Nils Patrick Johansson - Voz
- Joachim Nordlund - Guitarra
- Mats Gesar - Guitarra
- Ulf Lagerström - Bajo
- Johan Lindstedt - Batería
- Jocke Roberg - Teclado
Tracklist
- We Cry Out
- Walls
- God Is The Devil
- Die On Stage
- Tomorrow’s Dead
- God vs. Bad
- Suburban Song
- Lost Boy
- Slaves To Ourselves
- Black Eyed Children
Puntuación: 7/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario