viernes, 14 de marzo de 2025

Avantasia - Here Be Dragons


Tobias Sammet está de regreso con su mastodóntico proyecto Avantasia, donde cada nuevo álbum es esperado con ansias por miles de sus seguidores y el cual con el paso de los años y con cada entrega ha ido convirtiéndose en referente del género, llegando a encabezar festivales e incluso fagotizando a la banda principal, Edguy.

Si bien es cierto que los últimos discos de Avantasia han ido descendiendo en expectativas y no han llegado al nivel de álbumes anteriores, Sammet sigue siendo un genio y todavía es capaz de sorprender y sacarse de la chistera canciones de una alta calidad. Con este nuevo trabajo llevaba tiempo anticipando un regreso a las raíces, y si bien es cierto que Here Be Dragons está lejos de llegar al nivel e impacto de sus primeras obras como las dos Metal Opera o The Scarecrow, sí se adivina ese acercamiento al power metal más primigenio.

Pero naturalmente Tobias no está solo y como siempre, está escudado por su inseparable compañero Sascha Paeth a las guitarras y por su compañero en Edguy Felix Bohnke a la batería, desfilando como invitados unos vocalistas de renombre. El primer punto negativo que tengo es que sólo ha invitado a vocalistas, dejando de lado a guitarristas u otros músicos, algo que era más común en sus primeros discos y que con el tiempo se ha ido reduciendo. Lejos quedan aquellas colaboraciones de Rudolf Schenkher, Kai Hansen, Timo Tolkki o Bruce Kulick por poner algunos ejemplos.

La portada, realizada por Rodney Matthews, ya es un intento por llamar nuestra atención con ese imponente dragón y hacernos ese retorno al sonido de los primeros discos. Lo ha conseguido? Vamos a averiguarlo.

El disco arranca con Creepshow, con Tobias Sammet cantando en solitario, unos coros iniciales que ya nos meten de lleno y en general un tema pegadizo, directo y muy hard rockero que está hecho para iniciar los concierto de su inminente gira. Tobias sigue siendo un torbellino vocal y el estribillo es una explosión de melodías. Sin duda un inicio prometedor, continuista con sus trabajos más anteriores, llamativo y de esos que se graban en la cabeza.

Pasamos a la propia Here Be Dragons, el corte de mayor minutaje del álbum con casi 9 minutos, donde se desarrollan pasajes melódicos, con otros épicos, gran presencia de teclados, líneas de bajo marcadas y la primera colaboración, ni más ni menos que Geoff Tate, el cual hace un buen trabajo, pero creo que su registro vocal no está bien aprovechado en un tema de estas características, cantando a medio gas sin poder lucirse bien. El estribillo es también llamativo y es una de esas canciones que invitan a cerrar los ojos y dejarse llevar. Es una pieza que se podría comparar con la propia The Scarecrow, ya que comparten ciertas similitudes y con cada escucha me ha ido convenciendo más. Bonita, con cambios de ritmo e intensidad y elaborada.

The Moorlands At Twilight ya avanza ese prometido toque al power metal de los 90 y nos ponemos en pie porque contamos con la colaboración de Michael Kiske, que vuelve a poner su voz en un disco de Avantasia, lo que siempre es motivo de alegría. No van a faltar los elementos típicos, doble bombo, teclados rimbombantes, guitarras aceleradas y afiladas con unos solos estratosféricos y esa combinación de voces agudas y poderosas de Sammet y Kiske. Súmale un estribillo apoyado por coros y muy de la escuela de Helloween y ya tenemos el primer temazo del disco. Infalible.

The Witch fue uno de los adelantos del disco y hay un giro hacia derroteros más oscuros, con teclados sacados del metal gótico y la colaboración de Tommy Karevik (Kamelot), donde el estribillo vuelve a ser marca de la casa. Una canción diferente pero que funciona, donde Sammet y Karevik conjugan bien sus voces y los coros fantasmagóricos logran transmitir esa atmósfera de inquietud constante.

Para el siguiente tema regresa otro de los habituales colaboradores a lo largo de la historia de Avantasia, el gran Ronnie Atkins, vocalista de los legendarios Pretty Maids y que durante años giró con la banda, pero en los últimos años su salud le ha obligado a estar en un segundo plano, pero parece estar mejor y tenerlo de vuelta es motivo de regocijo. Él pone su voz en Phantasmagoria, otro cañonazo de power metal a golpe de teclados poderosos, guitarras contundentes, otro estribillo pegadizo y en general, ese power metal más heavy sacado de las entrañas de bandas alemanas como Gamma Ray o los propios Edguy.

Otro que no podía faltar a la cita con Avantasia es el grandísimo Bob Catley, que siempre aporta elegancia y clase en las canciones donde colabora, siendo en este caso Bring On The Night, protagonizada por los teclados y que nos ofrece un rock añejo de los setenta, más calmado y melódico, con referencias a como no podía ser menos, Magnum o incluso Meat Loaf, pieza hecha para que el vocalista británico se luzca, teniendo un corte que se distancia del resto pero que funciona y donde tenemos uno de los mejores solos de guitarra del disco.

Pero Sammet prometió reminiscencias a sus primeras obras y es cuando presenta Unleash The Kraken, tema que canta en solitario y que es un arrollador power metal con doble bombo (menudo trabajo de la batería por parte de Felix Bohnke), guitarras melódicas a la par que agresivas, un Sammet totalmente desatado a las voces arropado por teclados de fondo y como no podía ser menos, estribillo breve pero ganador. Una canción que sirve para que Sammet tenga su momento de brillar y demostrar que todavía es capaz de rubricar temazos como los de antaño y callar algunas bocas.

Y del power pasamos a un tema impregnado de folk con Avalon, donde encontramos a las voces a Adrienne Cowan (Seven Spires), la cual descubrí en la anterior gira de Avantasia y me dejó alucinado con su voz. Inspiración medieval, una Adrienne que brilla y deja huella, atmósfera más alegre y despreocupada y gran aportación de las guitarras con Sascha Paeth marcando territorio.

Against The Wind cuenta con el gran Kenny Leckremo (H.E.A.T.) en las voces siendo otro de los golpes en la mesa del disco, uno de los mejores cortes del álbum, power metal sin concesiones, directo y contundente, con ambos vocalistas en lo alto, estribillo épico apoyado en teclados que forman un colchón sonoro y esa batería desbocada que hacen de esta pieza una de las que más podría acercarse a los primeros trabajos de Avantasia.

Como colofón tenemos Everybody's Here Until The End, balada con el combo de Sammet y Roy Khan, que inicia con el piano y desemboca en un torrente melódico con estribillo meloso, con un Roy Khan apoteósico y que da cierre al disco de manera emotiva.

Here Be Dragons supera con creces el anterior álbum, el cual cosechó unas críticas bastante pobres, poniendo en duda la calidad del proyecto de un Tobias Sammet que parecía agotado compositivamente. Pero nada más lejos, ya que ahora nos ha dado un trabajo que si bien está lejos de alcanzar los estándares de sus primeros 3 discos (quien a estas alturas siga esperando un Metal Opera 3, no entiende a Sammet), logra darnos lo que muchos iban pidiendo ya, un regreso a los inicios musicales del alemán, el cual creo que cumple con creces, aunque por momentos se sigue notando cierto acomodamiento y continuísmo. Una entrega sólida y que con las escuchas logra afianzarse.

Discográfica: Napalm Records

 

Formación

  • Tobias Sammet - Voz, bajo, teclados, orquestaciones
  • Sascha Paeth - Guitarra
  • Felix Bohnke - Batería
  • Miro Rodenberg - Teclados, orquestaciones

 

Músicos invitados

  • Geoff Tate - Voz
  • Michael Kiske - Voz
  • Tommy Karevik - Voz
  • Ronnie Atkins - Voz
  • Bob Catley - Voz
  • Adrienne Cowan - Voz
  • Kenny Leckremo - Voz
  • Roy Khan - Voz 

 

Tracklist

  1. Creepshow
  2. Here Be Dragons
  3. The Moorland at Twilight
  4. The Witch
  5. Phantasmagoria
  6. Bring on the Night
  7. Unleash the Kraken
  8. Avalon
  9. Against the Wind
  10. Everybody’s Here Until the End

 

Puntuación: 8/10

 

lunes, 3 de marzo de 2025

Legado de una Tragedia - Lovecraft

 

Hace ya un tiempo de el nombre de Joaquín Padilla ha trascendido dentro del panorama del metal nacional gracias a su proyecto Legado de una Tragedia. Estas entregas de opera metal iniciaron con la trilogía dedicada al escritor y poeta Edgar Allan Poe, pasando después a El Secreto de los Templarios y Britania. Fue en 2023 cuando Aquelarre de Sombras, entrega dedicad a la vida y obra del pintor Francisco de Goya, llamó poderosamente mi atención, siendo para mí uno de los mejores discos del citado año. Fue también cuando el sonido del proyecto fue tornándose más oscuro y es ahora con Lovecraft cuando ese sonido se termina de afianzar.

Para esta ocasión, Joaquín Padilla ha querido centrar su disco en los relatos de H.P. Lovecraft, mundialmente conocido por ser el creador del llamado horror cósmico, lo que para el que suscribe estas líneas ya es un punto a favor, ya que soy un gran seguidor de la obra del escritor de Providence y la temática me es de sobra conocida.

Decir que Padilla, como siempre, se ha querido rodear de un buen puñado de músicos para acompañar su proyecto, siendo los músicos base el propio Padilla, quien canta y se ocupa de la guitarra en ciertos momentos, José Pineda (Snakeyes) al bajo, Miguel Ángel Leal (Ago) y José Rojo (Pain In Vain) a las guitarras y Carlos Expósito (Leo Jiménez) a la batería.

El disco se grabó en los Estudios Espartanos bajo la supervisión de Padilla y fue mezclado y masterizado por Raúl Abellán en los estudios The Mixtery. La portada ha sido realizada por Gustavo Sazes.

Pasando a las canciones, el álbum abre con la instrumental En la Noche de los Tiempos, donde su atmósfera oscura nos va introduciendo en el estilo narrativo de Lovecraft, con esos pasajes propios del doom metal y ciertos aires a banda sonora de Hollywood. Desde luego Joaquín Padilla demuestra dominar la parte sinfónica y esto es algo más que la típica intro, ya que encaja muy bien dentro del ambiente que nos pretende plasmar.

El primer relato de Lovecraft en ser abordado es En las Montañas de la Locura, uno de sus escritos más extensos e importantes. Comienza aquí el desfile de invitados, teniendo como vocalistas a José Pardial (Avalanch), Diego Royo (ex Salduie) y The Growlist (Perennial Isolation). Los 3 cantan, como no podía ser menos, de manera teatral, interpretando cada uno a diferentes personajes de la obra de ficción, combinando muy bien las voces limpias de Pardial y Royo con los guturales de The Growlist. Pineda, Expósito y Padilla están más que correctos y logran sobresalir en la faceta instrumental mientras que el solo de Miguel Ángel Leal es más que correcto. Musicalmente es una acertada mezcla de heavy metal clásico con partes sinfónicas muy bien colocadas, mientras que la letra y las interpretaciones vocales logran transmitir el frío y el ambiente del relato. Un inicio espectacular.

El siguiente tema es La Llamada de Cthulhu, posiblemente el relato más famoso y conocido del escritor de Providence. Aquí estamos ante una pieza de metal sinfónico que arranca con la base rítmica de José Pineda y Carlos Expósito que no dan tregua y el genial combo de las guitarras de Miguel Ángel Leal y Fran Soler (Adamantia) que se encarga del genial solo. Aquí tenemos a las voces a Iñaki Lozano (Coffeine), a un Andy Martínez (Headon) que hace una interpretación magistral y a Ssagitar (Killus) quien se encarga de los momentos más intensos y bestiales, haciendo que en momentos la canción aporte partes de groove metal. El estribillo es una genialidad, posiblemente de los mejores del disco y que hace que el tema gane muchísimo, no en vano fue elegido el single. En resumidas cuentas, una joya que se enmarca entre lo mejor que ha compuesto Joaquín Padilla dentro de este proyecto musical.

Pasamos a Herbert West: Reanimador, donde además del propio Padilla, se unen dos de las mejores voces del panorama nacional: Isra Ramos (Amadeüs) y José Broseta (Opera Magna) quienes forman un trío vocal exquisito y que encajan a la perfección con sus interpretaciones. Musicalmente une partes de power con death metal melódico, teniendo otro estribillo potente, aparición de violines por parte de Enrique Areola, coros épicos y una excelente pegada de Expósito a las baterías. El final, dejando únicamente a Pineda al bajo, queda genial.

La Sombra Sobre Innsmouth es otro de los grandes relatos de Lovecraft y para poder transmitir su atmósfera tenemos una genial mezcla de death metal melódico con metal sinfónico, con unos teclados muy inspirados en Epica o Nightwish. Las voces de Erik Cruz (Wah) José Garrido (Arwen) Israel Gadez (ex Adamantia) y Raúl Martínez (Vhäldemar) saben conjugarse de manera dinámica, con unas interpretaciones sublimes, mientras que contamos con los estratosféricos solos de Javier Nula (Opera Magna) que son de otro planeta y de lo mejor del disco. Aquí los arreglos orquestales también son dignos de mención.

A Pesar de Ti nos saca temporalmente de los relatos para centrar una canción en la vida del propio escritor, la cual fue convulsa y es una especie de carta o mensaje ficticio del propio Lovecraft a su madre, la cual fue durante su niñez sobre protectora pero a la vez fría y distante con el propio niño, el cual tuvo una vida marcada por traumas y enfermedades que le llevaron a refugiarse en los libros y crear su mundo oscuro. Aquí el protagonismo total lo tiene Joaquín Padilla, encargándose de la voz y de interpretar a Lovecraft y está acompañado por Kosta al violonchelo, Víctor Mateo al piano y Jezabel Martínez al violín. Es una pieza muy operística y oscura donde la interpretación vocal de Padilla es sublime y una de las mejores del disco, poniendo la piel de gallina con esa rabia y frustración que trasmite. Simplemente mágico.

El Morador de las Tinieblas nos regresa al imaginario del escritor estadounidense para brindarnos una pieza de power metal sinfónico, más afín a los primeros trabajos del proyecto. Tenemos a un bestial elenco vocal formado por Miguel Franco (Saurom), Alfonso Arnaiz (ex Sylvania) y Pablo Solano (Dragonfly), mientras que Pablo García (WarCry) nos regala un magistral solo de guitarra junto a otro de Miguel ángel Leal, mientras que a los teclados vuelven a contar con la presencia de Víctor Mateo. Estribillo potente, momentos de gran intensidad y por lo general, un corte más power y directo que convence.

Llegamos a una de las mejores canciones que además se centra en mi relato favorito de Lovecraft, El Monstruo en el Umbral, para el cual giran musicalmente hacia un doom metal de la escuela de Candlemass (un género que encaja a las mil maravillas con la narrativa de Lovecraft) con toques de metal gótico. Excelente elección de vocalistas, contando con Andros Maloik (Derby), Alex Bace (Morphium) el cual aporta unos tonos vocales muy a la línea de Moonspell, Chus Herranz que interpreta a Asenath de forma maravillosa y el propio Padilla. Guitarras densas y pesadas, teclados que arrastran melancolía, sección rítmica opresiva y grave y los arreglos orquestales que son una delicia. Giro de tuerca en el sonido de Legado de una Tragedia muy acertado.

El Horror de Dunwich es una explosión de metal sinfónico oscuro, yendo hacia terrenos más cercanos al sonido de bandas como Dimmu Borgir. Aquí hay una mezcla de voces que contrastan unas con otras, desde limpias como las de ángel Ortiz (Daeria), Javi Gianno (Cyan Bloodbane) y Kike Fernández (Nurcry), con la operística de Elisabeth Asmodeo (Against Myself) o la gutural y desatada de Hynphernia (Death And Legacy), quien interpreta a Shub-Niggurath. Encontramos baterías marciales mezcladas con doble bombo, teclados muy intensos por parte de Víctor Mateo y los tremendos solos de Pedro Monge (Väldemar) y de Robert Rodrigo, siendo el primero otro de los grandes hachas del panorama nacional.

con Dagón se retorna a ese doom metal que parece arrastrarse y donde volvemos a contar con un Joaquín Padilla que está sublime en su interpretación vocal, con gemidos, lloros y teatralidad desmedida. Espectacular. Además contamos con la llamada La Orden Esotérica de Dagón, un coro épico y oscuro que logra transmitir ese culto ancestral y con Diva Satánica (Bloodhunter) que interpreta al ser Dagón con sus guturales traídos del inframundo. Decir que los segundos finales de la canción son simplemente mágicos, haciendo que siempre se me pongan los pelos de punta. Otro de mis temas favoritos y que mejor logra transmitir la obra de Lovecraft.

Para cerrar y como último relato, Desde el Más Allá, una pieza de power metal sinfónico con un inicio que tiene ciertos aires a Stravaganzza pero que conforme avanza, en su estribillo, recuerda a Epica o a los propios Opera Magna. El solo de Miguel Ángel Leal, los coros, la batería desatada de Expósito en el estribillo y las voces de Padilla, Jorge Berceo (Zenobia) y Marc Storm (Drakum) coronan un tema sublime que pone el cierre a un disco donde cada canción brilla con luz propia.

Lovecraft nos vuelve a mostrar la genialidad creativa de Joaquín Padilla, un genio con una mente brillante que se nota que ha leído y se ha documentado a la perfección para plasmar de manera perfecta la obra de H.P. Lovecraft. Todo complementado con grandes músicos y vocalistas invitados que dan lo mejor de sí para darnos el álbum más directo de Legado de una Tragedia, pero también el más oscuro, variado musicalmente e intenso, que se puede escuchar con más ligereza y que estoy seguro que si eres seguidor del proyecto e incluso lector de Lovecraft, vas a disfrutar intensamente. Obra maestra.

Discográfica: Art Gates Records

 

Formación

  • Joaquín Padilla - Voz, guitarras, orquestaciones
  • Miguel Ángel Leal - Guitarra
  • José Rojo - Guitarra
  • José Pineda - Bajo
  • Carlos Expósito - Batería

 

Músicos invitados

  • José Pardial - Voz
  • Diego royo - Voz
  • The Growlist - Voz
  • Andy Martínez - Voz
  • Iñaki Lozano - Voz
  • Ssagitar - Voz
  • José Broseta - Voz
  • Israel Ramos - Voz
  • José Garrido - Voz
  • Erik Cruz - Voz
  • Israel Gadea - Voz
  • Raúl Martínez - Voz
  • Miguel Franco - Voz
  • Pablo Solano - Voz
  • Alfonso Arnaiz - Voz
  • Andros Maloik - Voz
  • Alex Bace - Voz
  • Chus Herranz - Voz
  • Ángel Ortiz - Voz 
  • Elizabeth Amodeo - Voz
  • Kike Fuertes - Voz
  • Hynphernia - Voz
  • Javi Gianno - Voz
  • Diva Satánica - Voz
  • Jorge Berceo - Voz
  • Marc Storm - Voz
  • Fran Soler - Guitarra
  • Robert Rodrigo - Guitarra
  • Pedro J. Monge - Guitarra
  • Javier Nula - Guitarra
  • Pablo García - Guitarra
  • Víctor Mateo - Piano y teclados
  • Kosta - Violín
  • Jezabel Martínez - Violín
  • Enrique Areola - Violíb
  • Helena Pardo - Coros
  • Rucardén Dávila - Coros

 

Tracklist

  1. En La Noche de los Tiempos
  2. En Las Montañas de la Locura
  3. La Llamada de Cthulhu
  4. Herbert West: Reanimador
  5. La Sombra Sobre Innsmouth
  6. A Pesar de Ti
  7. El Morador de las Tinieblas
  8. El Monstruo en el Umbral
  9. El Horror de Dunwich
  10. Dagón
  11. Desde el Más Allá

 

Puntuación: 9/10

 

domingo, 2 de marzo de 2025

Löanshark - No Sins To Confess


Desde Barcelona nos llega el esperado debut de Löanshark. Pese a que la banda se formó en 2017, hasta la fecha únicamente habían publicado Ep's y singles, pero por fin nos llega su primer larga duración, No Sins to Confess, con un total de 10 temas donde la banda desarrolla su heavy metal clásico y veloz.

La formación se mantiene estable desde su fundación, contando con Lögan Heads a la voz y guitarra, Aless Oppossed al bajo (ambos militantes también en la banda Crimson Storm) y Ángel Smolski a la batería (quien es miembro de Raptore)

Así pues este power trío despliegan su sonido directo y sin fisuras, comenzando por Electric Shockin' Waves, donde las líneas de bajo, la pegada de la batería y la guitarra suenan totalmente definidas, con una producción muy limpia. La potencia sonora es más que evidente y su sonido clásico es perceptible desde los primeros segundos, dándonos un estribillo convincente, la voz de Lögan aguda y melódica y en definitiva un heavy metal muy resultón que ya logra engancharte desde el inicio.

A lo largo del disco van a rescatar canciones de su primer EP, como es el caso de Machine Gunner, el cual es una revisión, sonando ahora más pulido, con mejor producción, con ligeros retoques y con una voz mucho más trabajada. Si has seguido la carrera de Löanshark, estos temas no te serán desconocidos, pero ahora con un evidente lavado de cara que hacen que luzcan geniales en este álbum.

The City Goes Fast arranca con sirenas policiales y nos ofrece un corte rápido y gamberro, con riffs de guitarra afilados y una sección rítmica impenetrable, donde se destaca el solo de guitarra y el frenetismo de la canción. Heavy metal en estado puro.

Another Man in the Trunk parece la continuación del tema anterior. Speed metal todavía más pasado de rosca, esta vez dando momentos al bajo para lanzar unas sólidas líneas de acompañamiento y la voz estando cada vez más aguda conforme avanza la historia.

Backstabber apuesta más por la melodía, con un riff que se va repitiendo al inicio y que terminará siendo el estribillo, el cual es adictivo y está hecho para ser coreado en directo. Corta pero intensa, una canción que va al grano y sin muchas complicaciones.

Llegamos a la mitad del álbum y Wet n' Wild nos vuelve a dar una dosis de heavy metal macarra, esta vez con alguna influencia del hard rock para hablarnos de mujeres de mala reputación, con su estribillo sacado de las entrañas de Los Angeles en los 80. Aunque siguen con el heavy metal en la base, sí se pueden encontrar trazas de bandas como Mötley Crüe o Ratt.

Midnight Shooter es otra de esas piezas rescatadas de sus primeras grabaciones y uno de sus himnos y no es de extrañar, ya que basta con escuchar su estribillo para no ponerlo en duda. Musicalmente es un bombazo, donde bajo y guitarra van marcando el riff principal y la batería marca el ritmo con una pegada potente. A eso hay que añadir un solo estratosférico y tenemos la fórmula perfecta.

Bad Guys Don't Lose tiene la esencia de los Judas Priest más ochenteros, donde velocidad y melodía se juntan y nos dan un corte donde los momentos instrumentales son lo mejor, desde el riff asesino, el bajo machacón y la batería frenética, todo desembocando en el que es para mí el mejor solo de guitarra del disco. Sin duda, uno de mis temas favoritos del disco.

Una de las sorpresas es el cover de la banda británica Marseille, Open Fire, el cual llevan a su terreno y lo aceleran ligeramente y de paso hacer su tributo a esta banda de culto de la NWOBHM, notándose la influencia de este movimiento en el sonido de Löanshark.

Para finalizar Heavy Metal Addicts es la última de las canciones de su antiguo catálogo en regrabar, con un estribillo festivo y que está precisamente para eso, toda una celebración a esta música y que tanto amamos.

Löanshark nos presentan un debut muy convincente, donde su sonido clásico te atrapará si estás buscando un heavy metal directo y sin complicaciones. La única pega que le puedo sacar es que de sus 10 canciones, 3 son regrabaciones y otra es una versión, dándonos un total de 6 piezas totalmente nuevas, pero se les puede perdonar al ser un primer disco. Eso no empaña su buena producción y que todas las canciones son disfrutables sin un segundo malo.

Discográfica: Roar / Rock of Angels

 

Formación

  • Lögan Heads - Voz, guitarra
  • Aless Oppossed - Bajo
  • Ángel Smolski - Batería

 

Tracklist 

  1. Electric Shockin’ Waves
  2. Machine Gunner
  3. The City Goes Fast
  4. Another Man in the Trunk
  5. Backstabber
  6. Wet n’ Wild
  7. Midnight Shooter
  8. Bad Guys Don’t Lose
  9. Open Fire
  10. Heavy Metal Addicts


Puntuación: 8/10