Slayer es una de esas bandas que no necesitan presentación, su legado y sus atronadores directos les hacen ser unos grandes del género. Quizás por eso no tienen prisa por editar discos con continuidad y son una excusa nueva para volver a los escenarios. Pero durante estos últimos años Slayer han tenido que lidiar con muchas dificultades para seguir adelante y poder sacar un nuevo trabajo de estudio, que se llevaba gestando desde 2011. La trágica muerte de Jeff Hanneman, principal compositor y letrista de la banda dejaba un vacío enorme y un shock entre sus fans. Por suerte, Gary Holt (Exodus), quien ya llevaba tocando con Slayer un tiempo mientras Hanneman se recuperaba de su enfermedad, decidió quedarse permanentemente. Pese a que su participación en estudio pasa desapercibida, llevando el control Kerry King y Tom Araya, ha demostrado ser capaz de dar la talla y mantener el alto nivel de sus directos. A esto hay que sumarle otro contratiempo: Dave Lombardo abandona otra vez Slayer tras la enésima bronca con la banda, dando lugar a otro culebrón y cruces de declaraciones. La solución fue traer de vuelta a un viejo conocido, Paul Bostaph que, quien pese a no tener la pegada reconocible de Lombardo también salva la situación. Y así vio la luz Repentless, el doceavo disco de estudio de unos Slayer que saben que es imposible volver a editar un álbum a la altura de sus grandes trabajos, pero que da la talla y muestran el potencial que todavía retienen estos dinosaurios del thrash metal. Repentless supone el primer álbum editado bajo el respaldo de Nuclear Blast y el primero en años en el que deja de estar producido por Rick Rubin y confiando la tarea a Terry Date (Pantera, Soundgarden Deftones) Mención especial tiene su llamativa y controvertida portada, obra de Marcelo Vasco. No paro de oír a la gente decir que es su mejor portada en mucho tiempo, pero a mí me parece horrible. Reconozco su forma de impactar al verla, crear polémica y mostrar el lado más salvaje y oscuro de Slayer, pero sinceramente, me parece fea.
En esta nueva entrega de Slayer tenemos por primera vez a Kerry King y Tom Araya tomando el control, quienes continúan con el sonido tradicional de Slayer manteniendo su legado pero a la vez mostrándose algo estancados en la fórmula, arriesgando poco, siendo eso un arma de doble filo. La primera sorpresa la encontramos en el primer corte de la canción, una intro instrumental llamada Delusions Of Saviour que imagino que tendrá como misión abrir los directos de la banda, pero no destaca por mucho más. La propia Repentless da el verdadero pistoletazo de salida. Una canción supuestamente dedicada a Hanneman donde encontramos a Bostaph machacando la batería junto a unos riffs muy pesados, rozando el hardcore y con el barbudo Araya pletórico mostrando su poderío vocal. De lo mejor del disco. Take Control nos trae a los Slayer más clásicos en un corte rápido y brutal donde encontramos cambios de ritmo y riffs asesinos típicos de los californianos. Vices baja un poco la velocidad pero a cambio aporta la maestría de Bostaph y un intento de rememorar los duelos de solos entre King y Hanneman pero sin llegar la magnitud de antaño y eso que Gary Holt mal precisamente no lo hace. Cast The First Stone tiene un sonido más cercano a los últimos trabajos que grabó la banda, siendo más denso y que pasa desapercibido al escucharlo, puesto que apenas destaca. When The Stillnes Comes es el tema más oscuro del disco, intentando traer una atmósfera diferente a lo anteriormente escuchado y que destaca por sus pasajes instrumentales, pero ciertamente, podrían haberse esforzado más, sobretodo cuando ya han hecho eso anteriormente y mucho mejor (comparad esto con Seasons In The Abyss por ejemplo, ni punto de comparación)
Con Chasing Death vuelven a lo seguro pero a estas alturas no convencen con una composición que hemos escuchado hasta la saciedad y que aburre a la par de ser predecible. Implode ya fue el adelanto que nos sirvieron antes de lanzar el disco. Lento al principio pero que rápidamente coge marcha para (por fin) darnos una canción a la altura de Slayer y a las expectativas de los fans. Slayer en estado puro, mostrando agresividad, caña y mala leche, lástima que llegue tan tarde en el disco. Sin duda el corte que más llama la atención es Piano Wire ya que fue compuesto por Jeff Hanneman y la banda ha decidido incluir como homenaje a su compañero caído. Se trata de un medio tiempo machacón que recuerda a los años del South Of Heaven, tanto en la forma de cantar de Araya como en la composición de las guitarras. Una pequeña muestra de lo que podría haber sido este disco si Hanneman siguiera con nosotros. Atrocity Vendor es un tema que han rescatado, pues fue un descarte del anterior trabajo World Painted Blood (y que demuestra lo faltos que andan de recursos) y que tiene papeletas para ser interpretado en directo, pero poco tiene que ofrecer salvo los solos de guitarra que una vez más intentan emular los años dorados de la banda. You Agaisnt You suena a los Slayer más noventeros, con esa mezcla de thrash y punk que no queda mal y donde encontramos los mejores solos de guitarra de disco. Para terminar Pride In Prejudice (tema compuesto en su totalidad por Araya) vuelve al medio tiempo oscuro y tétrico que tanto gusta a Slayer pero donde de nuevo no aciertan, salvando el trabajo de Bostaph el cual emula a Lombardo en la pegada, pero por lo demás, algo aburrido.
Repentless no será recordado como uno de los mejores discos de Slayer pero tampoco como el peor. Un álbum que pese a que han tenido varios años para perfeccionarlo al final nos ofrecen un trabajo bastante simple. Está claro que los cambios de formación no ayudan y que el vacío de Hanneman se nota, pero se esperaba algo más de una de las bandas más demoledoras de la escena. Esperemos que ahora que la banda ya se ha asentado tengan una oportunidad de redimirse y dejen colaborar a Bostaph y Holt quienes seguro que tienen mucho que decir. Mientras, seguiremos disfrutando de sus directos, que al menos en eso siguen convenciendo.
Discográfica: Nuclear Blast
Formación:
- Tom Araya - Bajo, voz
- Kerry King - Guitarra
- Gary Holt - Guitarra
- Paul Bostaph - Batería
Tracklist
- Delusions Of Saviour
- Repentless
- Take Control
- Vices
- Cast The First Stone
- When The Stillness Comes
- Chasing Death
- Implode
- Piano Wire
- Atrocity Vendor
- You Against You
- Pride In Prejudice
Puntuación: 6.5/10
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